La alimentación de las hormigas en casa es casi tan complejo como organizar una cena familiar en Navidad.
Vale, imagina esto: tienes un hormiguero casero, un mini universo lleno de obreras currantes y reinas mandonas. ¿Y ahora qué? ¿Qué les das de comer? Parece fácil, ¿verdad? Azúcar, proteína y listo… Pues no exactamente.
Vamos paso a paso. Aquí te cuento lo básico (y lo no tan básico) para que tus hormigas vivan contentas, limpias y sin montar una rebelión interna. Porque sí, hasta los insectos se estresan si les das la comida equivocada. Flipante, pero cierto.

🌟 ¿Qué demonios comen las hormigas?
Te sorprendería. Las hay que comen dulces, otras bichos muertos y algunas incluso cultivan hongos. No es broma. Pero por norma general necesitan:
—Azúcares para energía
—Proteínas para crecer y reproducirse
—Grasas para guardar reservas (como yo con las galletas)
—Y, claro… agua, pero sin ahogarse
Eso sí, depende de su rol. Aquí te lo dejo en plan rápido:
• Obreras: azúcares. Curra, curra, curra.
• Soldados: azúcares + proteínas. Un poco más toscas.
• Reina: proteínas a saco. Está en modo «mamá full time».
• Larvas: no comen solas. Las obreras hacen de niñera y chef.
🌱 Los macronutrientes clave (y algún que otro invento raro)
Azúcares:
- Miel diluida → funciona bien.
- Frutas tipo plátano o manzana.
- Jarabe de azúcar (pero cuidado, no lo empapes todo).
Proteínas:
- Insectos muertos (moscas, tenebrios… lo típico del menú gourmet).
- Clara de huevo cocida (sí, cocida).
- Yogur natural sin azúcar. Una gotita. No te flipes.
Grasas:
- Semillas trituradas, nueces molidas (sin sal, claro). Ideal para las Messor.
¿Sabías que huelen a tierra mojada cuando están bien alimentadas? Bueno, o eso dicen algunos. Yo solo noté un vago olor a lluvia una vez… o tal vez fue mi jardín.
Agua:
- Siempre, siempre, SIEMPRE disponible. Mejor en algodón húmedo. Nada de charcos, que no son patos.
⛔️ Cosas que no deberían ni oler
A ver, parece obvio, pero hay quien lo hace igual. Evita:
—Comida procesada: galletas, caramelos, restos de pizza.
—Salados: especias, salchichas… ¿en serio?
—Grasas chungas: aceite de freidora, manteca rancia.
—Carne cruda sin control → bacterias, infecciones y drama.
Consejillo random: si dudas… no se lo des. Fácil.
⏳ ¿Con qué frecuencia comen? ¿Una vez? ¿Cinco? ¿Depende?
Pues depende, claro. Pero te doy una guía para no volverte majareta:
• Colonias mini (menos de 50): 2-3 veces/semana.
• Colonias medianas (50 a 200): día sí, día no.
• Colonias grandes (200+): todos los días. Pero poquito.
Y en invierno… muchas entran en modo «Netflix y no como» (aka diapausa).

Alimentación de las hormigas en casa. No les des chorizo.
📊 Tabla express: alimentos sí, alimentos NOPE
| Tipo | Ejemplos seguros | Ejemplos peligrosos |
|---|---|---|
| Azúcares | Miel, frutas maduras | Gaseosas, caramelos |
| Proteínas | Insectos, clara cocida | Embutidos, carne cruda |
| Grasas | Semillas trituradas, nueces | Frituras, mantequilla |
| Agua | Algodón húmedo | Agua estancada o sucia |
💪 Tips para alimentar sin liarla
- Pon pequeñas gotas. Mejor que sobre poco a que se monte un buffet libre.
- Retira lo que no se comen en 24h. Fungus is coming.
- Zona limpia → usa plástico, papel aluminio… lo que se pueda lavar.
- Agua siempre. En algodón, please.
- Ah, y nada de dejar presas medio podridas en el nido. ¡Puaj!
🤔 ¿Sabías esto sobre las hormigas y su dieta?
—No mastican. Disuelven con enzimas y regurgitan.
—Las Atta cultivan hongos. Como pequeños granjeros en miniatura.
—Las melíferas… almacenan néctar ¡en el cuerpo! Imagina llevar tu desayuno en el ombligo.
Esto me recuerda a cuando intenté criar grillos para darles proteína. Fue un caos. Chillaban por la noche. Al final liberé a todos. Cosas que pasan.
❌ Errores comunes (que probablemente ya has cometido sin saberlo)
- Sobrealimentar. Las hormigas no tienen nevera, ojo.
- Monodieta. Variedad o muerte. Bueno, no literal.
- Olvidar el agua. Peligroso, letal incluso.
- Darles comida humana. Ellas no quieren tu pizza.
- No limpiar. ¿Te gustan los hongos? A ellas tampoco.
📆 Cierre sin dramatismos (pero con cariño)
Al final, alimentar bien a tus hormigas no es tan difícil si observas, aprendes… y no haces tonterías. Ya sabes, prueba, falla, ajusta. Algunas necesitan proteínas cada día, otras solo frutas. ¿Lo peor? Que no te lo dicen. ¿Genial? Más bien… frustrante.
Pero también es bonito. Porque ves cómo crecen, cómo interactúan. Y ahí, en su mundo de túneles y larvas, tú eres como un dios. Uno torpe, pero dios al fin.

